De acuerdo con reportes de cobertura educativa en el municipio, existe una cifra en el periodo 2023 – 2024 de 4.541 niños, niñas y adolescentes que salieron del sistema educativo por diversos factores, y el propósito es generar las condiciones, identificar la población ausente y darle continuidad a los que están vinculados en la actualidad.
Ante esta realidad la alcaldía municipal lanzará la campaña ‘Todos al Aula’, la cual hace parte de la estrategia de Búsqueda Activa, y cuyo propósito es lograr que en Valledupar ingresen 5.600 niños y niñas por primera vez al sistema educativo, de igual manera, encontrar a los menores que desertaron del mismo.
“‘Todos al Aula’ es una apuesta incluida en el Plan de Desarrollo Valledupar, Municipio Equitativo y Solidario, bajo el liderazgo del alcalde Ernesto Orozco Durán, quien busca disminuir la brecha nacional de deserción escolar que, por diversos factores, se ha registrado en años recientes”, sostuvo el secretario de Educación, Camilo Pinto Morón.
El lanzamiento será el martes 24 de septiembre desde las 8:00 a.m., en las instalaciones de la Institución Educativa Técnico La Esperanza, escenario donde la Secretaría de Educación Municipal socializará la campaña y el impacto que se pretende en las diferentes comunas de Valledupar.
Durante la presentación oficial de ‘Todos al Aula’ instituciones como el ICBF, Prosperidad Social, Migración Colombia, Renta Ciudadana, instituciones educativas, sectoriales de la Administración Municipal, al igual que líderes comunitarios, acompañarán el acto, que traza su objetivo en lograr el impacto de inscripción y posterior matrícula para la vigencia 2025.
Panorama de la crisis
Como historia reciente de la crisis Vale la pena recordar que, en 2022, Juan Restrepo Pinzón, Consejero Municipal de Juventu de San Alberto – Cesar, enfatizaba que: Es innegable que la educación de nuestro departamento ha sufrido el abandono, la negligencia y la degradante corrupción por parte de las instancias estatales. En el Cesar siempre se ha negado el acceso a la educación digna y, desde aquí, podemos explicar las altas cifras de pobreza que vivimos.
Es claro que debe reconocerse que una educación a la que puedan ingresar todas las personas que deseen hacerlo, crea las condiciones para que la gente sea partícipe del desarrollo social y productivo y aquí me gustaría recordar un dicho popular de nuestros padres que dice: “La mejor herencia es la educación.”, entonces ¿qué herencia nos está dejando el Cesar?
Hoy lo que tenemos son aulas e infraestructuras arcaicas, que las décadas han dejado en la decrepitud y salta a la vista el dramático hacinamiento, pues hay colegios que fueron construidos para 800 o 1.000 estudiantes y están atendiendo más de 2.000 alumnos. A esta situación se suman las bibliotecas con libros desactualizados, instituciones sin agua, sin electricidad, sin servicio de aseo, ni vigilancia, sin internet o sin equipos de cómputo cuando el mundo requiere de estudiantes hábiles en las artes tecnológicas. Y cómo dejar de lado que algunos docentes usan métodos pedagógicos que no son eficientes o directivos de colegios y de la Universidad Popular del Cesar cuestionados por malos manejos administrativos, y muchas otras dificultades. Difícilmente se puede enseñar o aprender en esas condiciones y, aún menos, lograr posicionar al departamento del Cesar como un territorio líder en educación y cultura.
¿Cuántos García Márquez hemos echado por la borda? ¿Cuántos juglares y poetas no han podido escribir nunca sus líricos párrafos por no haberles enseñado a amar la literatura? ¿Qué tantos científicos, médicos, ingenieros e inventores han quedado en el olvido por esta decadencia educativa? Este modelo educativo castra la creatividad y la innovación, y doblega líderes y emprendedores, pero lo que agrava nuestra situación es el pútrido entorno político, pues la corrupción le ha puesto cadenas a nuestro desarrollo. Podríamos resumir esta situación en la frase de una canción que dice: “Y en las sombras; mueren genios sin saber, de su magia…”
Es común ver todos los años indignantes noticias tituladas como “En la mano, reciben refrigerios niños de Aguachica”, incluso algunas que son inconcebibles como niños que “Reciben sus clases en cambuches por robo a la escuela Alfonso López de Aguachica”, o, a falta de los servicios de vigilancia y aseo, que entrando el quinto mes del año no se han contratado para muchos municipios, “Roban 65 computadores en colegio de Valledupar” e incluso algunos hechos que ponen en riesgo la vida de estudiantes y profesores “Vándalos ingresan a colegio y golpean a docentes y estudiantes en Valledupar” o esta reciente “Salven la Universidad Popular del Cesar” por el déficit de alrededor de 16 mil millones de pesos según le ha informado la oficina de Planeación de la UPC a estudiantes y docentes.
No alcanzamos a dimensionar la magnitud de este gran problema, toda vez que no hay condiciones para aprender cuando se estudia con hambre, inseguridad, sin la pedagogía pertinente, o sin un salón y herramientas educativas adecuadas. Por eso, debemos concentrarnos en la calidad, pues de esta manera se garantiza la permanencia y el interés de los estudiantes en el sistema educativo.
Entonces, ¿es una causa perdida la educación del departamento? ¿acaso nosotros -en especial nuestros dirigentes y líderes- seremos incapaces de despojarnos de nuestros prejuicios y egos para actuar ante esta problemática? ¿Cuándo iniciaremos una gran mesa de diálogo a nivel departamental donde converjan todos los sectores políticos, sociales, docentes, administrativos, padres y madres de familia y estudiantes, entre otros, y que podamos definir una alternativa a esta problemática? La educación necesita reverdecer para que así nuestro territorio, por fin, avance.
Las apuestas del gobierno del Cesar

Tras una inversión de $342.700 millones, el Cesar se posiciona como el departamento con mayores aulas escolares que se construyen actualmente en el país.
El impacto de esta infraestructura física busca fortalecer la formación integral de 25.000 estudiantes de esta sección del Caribe colombiano, logrando reducir el déficit de aulas escolares en 58 por ciento.
Las obras contemplan 332 aulas que están en ejecución, 40 más que están en proceso. Las iniciativa hacen parte del Plan de Infraestructura Educativa que lidera el gobierno departamental, direccionado por zonas en tres frentes de trabajo: 162 norte, 72 centro y 88 sur.
En el norte se benefician los municipios de Pueblo Bello, Manaure, Valledupar, San Diego, Agustín Codazzi y La Paz .
En el centro El Copey, Bosconia, Astrea, Chimichagua, Curumaní, Chiriguaná, La Jagua de Ibirico y Becerril.
En el sur, Tamalameque, Gamarra, Pailitas, Pelaya, Aguachica, San Martín y San Alberto.
En la capital del Cesar se construyeron tres megacolegios: Casd Simón Bolívar, Instpecam y Alfonso López. Estas instituciones cuentan con un pulmón verde denominado ‘El parque de la vida’, en homenaje a las víctimas ya la paz.
La nueva edificación del Casd, constará con tres pisos, 30 aulas de clases de 74 metros cuadrados cada una, plazoleta de recepción, vía privada, parqueadero, zona administrativa, sala de profesores, un gran patio central, cafetería con comedor, una emisora, salón múltiple, salón de música y danzas, batería sanitaria, dos canchas multifuncionales, taller de tecnología, biblioteca, salas de informática, salas de estudio, taller de dibujos, taller de arte, laboratorios de ciencias y laboratorio de física.
“Esta infraestructura cuenta con todas las especificaciones técnicas establecidas por el Ministerio de Educación. Con ello mejoramos la calidad y cobertura educativa en el departamento. Los estudiantes y docentes, merecen una institución educativa del máximo nivel y esta no le va a envidiar nada a ninguna institución educativa de Colombia”, Andrés Meza, gobernador del Cesar.
Hacen parte de esta infraestructura educativa la construcción y dotación de universidades, ampliando así las oportunidades para jóvenes del Cesar al igual que departamentos vecinos como Magdalena y La Guajira.
Así lo evidencia la construcción de un aulario en la Universidad Popular del Cesar, sede Aguachica, que demandó una inversión de $25.000 millones, que favorece a 1.200 estudiantes.
En Curumaní se construirá la sede de la Universidad Nacional ya Distancia (Unad) con recursos de $24.000 millones.
Otras inversiones en la misma dirección
En marco de estas inversiones también se destaca la puesta en marcha del Plan de Infraestructura Vial ‘De lo urbano a lo rural’, que abarcan 300 kilómetros que avanzan para consolidar la meta de 367.4 kilómetros de vías secundarias y terciarias, que demandan una inversión de $600.000 millones.
A este plan se suman los tramos La Paz-Manaure, Palenquillo-Gamarra y Aguas Blancas, corregimiento de Valledupar.
¿En qué anda la familia Vallenata?

Una situación lamentable y bochornosa, se presentó la mañana de ayer, en la entrada a la Institución Educativa Alfonso López Pumarejo de Valledupar, donde dos madres de familias se enfrentaron a puños y patadas, para ‘resolver’ unas diferencias que tenían sus hijas y que desde hacía días las venía perturbando.
El alarmante episodio se dio a conocer a través de videos aficionados, que circularon por redes sociales y que han generado preocupación entre la comunidad educativa por la violencia e intolerancia desatada.
Según se pudo conocer, dos estudiantes de 12 años cursantes del sexto grado, venían enfrentando unas diferencias, cuyas causas no están claras. Presuntamente la madre de una niña que estaba siendo amedrentada por su compañera, decidió llegar al colegio y pegarle a la menor agresora, situación que no fue tolerada por la acudiente de esta, y de inmediato se propició la riña en la unas de ellas resultó herida.
Ana Perea Sarmiento, quien resultó lesionada en el rostro, informó que se acercó al colegio a pedir una explicación, porque su hija está siendo acosada, amedrentada y agredida por otra. “Fui a formular la denuncia ante la directiva del colegio, pero no me prestaron atención”.
Por ello, se acercó a hablar con el coordinador de la institución para que llamaran a la representante de la niña agresora, a quien “me le acerqué para pedirle que no siguiera perjudicando a mi hija, pero se puso agresiva y me golpeó. En ese momento llegó la mamá y sin preguntar me agredió y me causó las heridas”.
Perea Sarmiento dijo que acudió a la Fiscalía a formular la denuncia, y a su vez que se tomen acciones disciplinarias contra la directiva del colegio que en ningún momento le prestaron atención a su queja.
Hasta el momento, la directiva del colegio no se ha pronunciado sobre este caso, así como tampoco la Secretaría de Educación.