
Los 70 millones que separan a “El Mono” Zabaleta de Omar Geles
Las canciones al inicio no tenían dueños eran propiedad del pueblo, la oralitura obedecía al analfabetismo de la mayoría de los juglares y a la falta de registros de propiedad de sus composiciones. Las manifestaciones literarias cantadas a manera de noticias, anécdotas, cuentos, entre otras, no generaban ingresos por derechos de autor.