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¿Es Colombia una narcodemocracia?

Por: Iván Fernando Márquez Gómez.

La vida parece un Dejávu, (esa sensación mental, como si yahubiéramos vivido esa historia y momento o estado en ese lugar) pareciera que en Colombia los que nacieron en los años 70 y 80 regresaran a la bonanza marimbera, en donde aquellos personajes de la Costa Caribe, traficaban marihuana para el sur de La Florida en los Estados Unidos, esos que eran nombrados por los mejores artistas de la música vallenata, como Jorge Oñate, Diomedes Díaz los Betos y Poncho Zuleta, los que más sonaban en todo el caribe y Colombia.

Toda la Sierra Nevada de Santa Marta, desde el descubrimiento de Cuidad Perdida por parte del Instituto Colombiano de Antropología en 1976, la que abarca los tres departamentos caribeños, La Guajira, el Cesar y Magdalena fue llenada de esta planta que es medicinal, pero que la utilizan como estimulante, la mejor marihuana del mundo como la llamaban los gringos,

Los campesinos dejaron de sembrar los alimentos de pan coger para dedicarse al cultivo de la marihuana puesto que era más rentable, les producía mejores dividendos económicos, un quintal de marihuana valía $110.000, uno de café no llegaba a los $50.000, y el de fríjol rondaba los $20.000 para esos tiempos, la diferencia era abismal.

Aparecieron personajes pintorescos, con apodos o remoquetes rimbombantes y sonoros “Lucky” Cotes, Samuel Alarcón, El Hombre Malboro o “El Gavilán Mayor”  propios de la idiosincrasia costeña, esos que con sus excentricidades y ocurrencias, eran la noticia del momento, por ser ostentosos y mostrar poderío y dinero en su modo de vida, para demostrar que tenían mucha plata hacían cosas fuera de lo común para llamar la atención,las Browning 9 milímetros y las Magnum 44 llevaban las iniciales de los nombres en piedras preciosas, incrustadas en la cacha de las armas.

En esta bonanza marimbera, surgieron nuevos ricos quienes comenzaron a lucir cadenas, anillos y pulseras de oro a andar con guardaespaldas y a cerrar prostíbulos para enfiestarse con las meretrices,prendían un cigarrillo con los billetes y en vez de contar el dinero lo pesaban. Se atrevían a dejar un carro nuevo, último modelo, abandonado en la vera la carreta, por tener una pequeña falla mecánica, cruzaban un gallo fino con un gallinazo o zamuro para obtener el de mejor raza y más valiente para vencer a sus rivales en la riñas de gallos, sus parrandas vallenatas también fueron muy famosas, con la comida típica de la costa, estas duraban varios días y los regalos que le hacían a los artistas invitados, iban desde camionetas lujosas, hasta varias cabezas de ganado o fincas en la región, visitaban las mejores tiendas en USA para comprarle a sus amantes ropa y calzado de marca y estas lucirla en las fiestas y en los velorios, que eran muy frecuentados solo para eso.

Estos marimberos de la época, eran la noticia de todos los medios de comunicación en Colombia y países vecinos, así como de escritores y cronistas nacionales, ya que se hicieron películas, documentales y se escribieron libros comoLa mala hierba, del conocido periodista Juan Gossaín y Leopardo al Sol, de Laura Restrepo.

Se escribió y se habló mucho sobre esas aventuras y los nexos con los políticos del momento, en donde invertían millones de dinero, sumas exagerada para las campañas de los aspirantes a los cargos políticos, buscando favores con las autoridades, que les limpiaran su hoja de vida, igual gastaban cifras considerables patrocinando a una muchacha bonita y humilde del pueblo, bien sea para los reinados del carnaval o en el reinado nacional de la belleza en Cartagena, también le pagaban la carrera universitaria a una joven de La Guajira, del Cesar o del Magdalena.

La gran mayoría de ellos fueron encarcelados por sus actos desmedidos, siendo extraditados a  los Estados Unidos, como el famoso Hombre Malboro que recientemente fue dejado en libertad después de pagar condena en los Estados Unidos por narcotraficante, algunos perdieron la vida en sus aventuras y exageraciones o enfrentamientos con sus enemigos o con las autoridades.

Pareciera que la situación no ha cambiado mucho para los habitantes de Colombia, desde hace 40 o 50 años hasta ahora, hay muchos carteles, políticos en negocios turbios, pasamos de los carteles del narcotráfico a los carteles de la corrupción, como el cartel de la toga, el cartel de las contrataciones, de los Nule ydel ex alcalde Samuel Moreno en Bogotá, entre otros.

Aún persiste el tráfico de droga y los nexos de estos con la política nacional y con familias prestantes y de apellidos ilustres, hay muchas personas dedicadas al negocio ilícito de estas sustancias, pero ahora no es con la marihuana, sino con la cocaína, algunos ven un mejor negocio, en la siembre de la hoja de coca.

Colombia es el mayor productor de cocaína en el mundo y Estados Unidos el mayor consumidor de este alucinógeno, sin olvidar que la nación es el aliado número uno de USA en esta parte del continente.

Por todo esto, algunos dentro y fuera del país llaman a Colombia una narco estado, debido a que muchos miembros de la política están inmersos en problemas de narcotráfico y de paramilitarismo, ambos van de la mano, son muchos casos y personajes nacionales que tienen líos con las autoridades por el tráfico de droga, al ex embajador de Colombia en Uruguay Fernando Sanclemente, le encontraron tres laboratorios de coca en su finca Aras, pero él se niega y dice que no sabía nada de eso y culpa al mayordomo, al encargado de la finca.

Sin olvidar lo más sonado de este caso, la Ñeñepolítica, debido a que toca muchos personajes de la política nacional, con el ex presidente Uribe y al actual mandatario Iván Duque, los nexos de José Guillermo Hernández, conocido como “Ñeñe”, quien se presentaba en redes sociales como empresario y ganadero y amigo del actual mandatario, aunque este lo negaba, existiendo fotos en fiestas y reuniones privadas, este personaje fue asesinado en Brasil, supuestamente para atracarlo, pero todos saben que fueron cuentas pendientes con el narcotráfico.

En conversaciones interceptadas, se escucha que el Ñeñe Hernández, iba a entregar unos dineros que debían pasar por debajo de la mesa, para financiar la campaña presidencial del actual presidente Iván Duque, como es natural y obvio estas acusaciones fueran negadas y rechazadas por los dos implicados en el caso.

Pero la situación crea suspicacia, si el Fiscal de turno, que debería investigar el caso Néstor Humberto Martínez también duró dos años con las denuncias engavetadas y además, tiene denuncias en su contra por el problema de Odebretcht, otro caso de corrupción en el país, si no es por  la presión de la oposición política, acusándolos de un cartel del silencio o del encubrimiento, esto no sale a la luz pública.

Los políticos corruptos de hoy en día y algunas autoridades, los que supuestamente  deberían encargarse de solucionar los problemas de la comunidad, como los ministros, jueces, fiscales, embajadores, alcaldes y gobernadores, son los nuevos capos y mafiosos de otrora, como los marimberos se dedican a comprar, manipular y violar las leyes.

Los primeros lo hacían con amenazas de frente, los jefes mafiosos de los años 70 y 80 intimidando, sobornando o despareciendo  a sus rivales y a las leyes, los segundos los de hoy en día, son más elegante, con títulos universitarios, post-grados, maestrías y doctorados, en las mejores universidades de Colombia y del exterior, haciendo reuniones, convenios y negocios con grandes empresas y personajes prestantes y pudientes, sean estos nacionales e internacionales.

Estos son los nuevos capos nacionales al estilo de la Cosa Nostra italiana, familias adineradas, que se creen superiores, más inteligentes, de mejor raza, de sangre azul, con derechos a mandar y a ocupar ellos y su familia los mejores puestos públicos o privados, existe un presidente con acusaciones de ser patrocinado por el narcotráfico, una Vice-Presidenta con un hermano narco, pero que hoy gaza de libertad gracias a convenientes, alianzas y pagos para silenciar las acusaciones.

Tampoco debemos olvidar los sonados casos de narcotráfico de personajes y políticos nacionales, como la avioneta en la Isla de Providencia con más de 400 kilos de cocaína, perteneciente auna firma asociada de Miguel Jaramillo, esposo de la actriz Alejandra Azcárate la que salió de Guaymaral sin que nadie se diera cuenta, a pesar de que allí, existe una base antinarcótico.

Volvimos a la época de los años 70 y 80, en donde el narcotráfico controlaba todo, pero ahora no solo es con la droga, los negocios entre las familias que tienen vínculos directos o indirectos con la política, los que desfalcan a la nación, pero lo más triste es que lo hacen seguidamente, en complicidad con las leyes oprobiosas, injustas y absurdas del país, en donde por vencimiento  de términos los dejan libres o les dan casa por casa.

Para luego regresar a ocupar altos cargos con negocios fraudulentos, son muchos los casos el escandalo más reciente es el de la ex ministra de las TIC Karen Abudinén, quien se vio obligada a renunciar debido a la presión ejercida, por la pérdida de 70 mil millones de pesos, para instalar internet a los niños más pobres de la nación, en donde participó Emilio Tapia, quien hace varios años fue denunciado por lo mismo, pero increíblemente participó en esto turbio negocio.

No olvidemos que el exministro Alberto Carrasquilla en dos oportunidades ha estado en el ojo el huracán, primero como ministro de Uribe con los famosos bonos de agua, en donde se invirtieron $440.000 millones para el suministro de agua y alcantarillado, pero esta nunca llegó y después como ministro de Duque con la sonada y rechazada reforma tributaria.

La caída del puente Charajara, en la vía que comunica a los llanos con Bogotá, otro elefante blanco, de quien nadie responde, no hay detenidos y esa plata también se perdió. Oneida Pinto, la que fue alcaldesa de Albania y también fue gobernadora de La Guajira, está implicada en líos con la justica por varios delitos, como falsedad en documentos, celebración indebida de contrato, quedó libre por vencimiento términos.

La Ruta del Sol en la costa caribe es un importante corredor vial, que hace parte de la Red Nacional de Vías de Colombia, esta gran obra inició en el año 2010, no se ha podido culminar, porque hace parte del escándalo mundial como es Odebrecht, tampoco hay responsables ni personas capturadas por estas anomalías, tiene fecha de entrega para el 21 de octubre del 2024.

Si esto no es una  narco dictadura, en donde en el año 2007 hubo 53 condenas en firme, de las cuales siete fueron por narcotráfico, tres por el delito de homicidio y 342 terminaron en sanciones disciplinarias, aclarando que 110 de esas sanciones terminaron en destitución por los nexos con negocios relacionados a  la droga, entre los que se vieron involucrados gobernadores, alcaldes, concejales y diputados.https://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-10112045

Es tan evidente los nexos de la política colombiana con los narcotraficantes y los negocios de corrupción, que dos expresidentes se acusan entre ellos de haber recibido dinero de los carteles de la droga para sus campañas presidenciales, aunque todos sabemos que la gran mayoría han sido financiados por estos personajes, casi todos están corrompidos, un anterior fiscal con problemas por Odebrecht, el actual fiscal, es amigo íntimo del presidente, un exministro de justicia mintiendo con falsos positivos, los abogados como testigos de esos casos juzgados por falsedad, así nunca habrá justicia y equidad, si los implicados son juez y parte, es como llevar a la mamá del asesino a declarar, qué podrá decir y a favor de quién.

En el año 2014, había 35 candidatos al Senado y a la Cámara, investigados por la Corte Suprema de Justicia, por tener vínculos con la parapolítica, solo 9 se quedaron sin curul. Es decir 26 congresistas señalados de tener nexos con las AUC, repetirían en el cargo y están siendo investigados por la Corte Suprema, por pertenecer a grupos armados ilegales, pero eso a nadie les preocupó, parecía tan normal en este país.

Parece que nada ha cambiado, los artistas vallenatos como Silvestre Dangond, los desparecidos Diomedes Díaz y su hijo Martín Elías, saludaban a Emilio Tapia en sus grabaciones, en Colombia, la guerra es un negocio, en donde se beneficia el más fuerte, quienes ostentan el poder, como siempre se ve perjudicado el pueblo inerme en medio de este conflicto, las mafias y los nexos con el tráfico de droga sigue siendo un negocio normal y los líderes políticos continúan teniendo nexos con ellos para sostener los privilegios que les brinda esto, tanto económica como políticamente.

 

 

 

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