Por: Equipo Académico
La educación es la herramienta fundamental de los pueblos libres. Esta razón, por si sola, devela la gigantesca importancia que reviste el septuagésimo aniversario de nuestra querida institución Educativa Juan Mejía Gómez. Valorar la misión educativa en su total y exacta dimensión, y celebrar un prolongado y fructífero trayecto pleno de logros y realizaciones es y será siempre nuestro objetivo.
La institución Educativa, Juan Mejía Gómez ubicada en la zona urbana del municipio de Chiriguaná en el departamento del Cesar (Colombia), fue creada mediante decreto N° 033 de enero de 1950, emanada de la gobernación del departamento del Magdalena, con el nombre de Liceo Polo Lara, en honor al secretario de educación de ese departamento de esa época, “ROMULO POLO LARA “. Iniciando sus labores con la modalidad de bachillerato académico para los grados quinto de preparatoria y primero de bachillerato de sexo masculino; años más tarde se dio matricula al personal femenino.
Fue este el primer colegio de bachillerato del centro del Cesar, como respuesta a las grandes necesidades educativas de la época, en la cual todo el que aspiraba a seguir estudios secundarios, debía trasladarse a centros muy distantes y de difícil acceso por la falta de vías.
En 1958, mediante decreto emanado de la gobernación del Magdalena, cambio su modalidad de Bachillerato académico a Pedagógico, denominándose “ ESCUELA NORMAL PARA VARONES DE CHIRIGUANA “, lo que genero un gran número de maestros comprometidos con su labor férrea de impartir sus invaluables conocimientos.
Con el propósito de buscar grandes cambios trascendentales, el Ministerio de Educación Nacional, torna su mirada a nuevas propuestas que conlleven al mejoramiento del sector de la educación; es por eso, que a partir de 1963, la enseñanza en el país da un vuelco gigantesco, estableciéndose tres niveles de enseñanza: Básica Primaria, Básica Secundaria y Media Vocacional. El Ministerio de Educación elimina las normales rurales, dando paso a los Centros Pilotos de formación docente, en consecuencia y pese a que la de Chiriguaná se había nacionalizado, se cambia nuevamente a Bachillerato Académico, y según resolución No. 0114 de enero 25 de 1972, recibe el nombre de Colegio Nacional Mixto de Bachillerato de Chiriguaná, del cual surge la Primera Promoción de 28 graduandos en el año de 1974.
Posteriormente se le da el nombre de Instituto Técnico Juan Mejía Gómez, recibiendo tan distinguida denominación a un ilustre maestro que fue orgullo y pionero en la educación Chiriguanera.
En la actualidad por abarcar tres sedes educativas primarias, la llevan a ser nombrada Institución Educativa Juan Mejía Gómez, con una nómina de 76 docentes, 2139 estudiantes, repartidos en dos jornadas diurnas y una nocturna, con proyección a Jornada Única.
Por su dirección han pasado más de 30 rectores; su rector fundador fue Delfín Altamar y actualmente regenta la Institución la doctora Luz Alba Royero Pérez. Junto con ella seis (6) personas más han tenido la honra y orgullo de haber sido estudiantes, profesores y también rectores de esta magna Institución; son ellos: Leovigildo Mejía Martínez, Simón Martínez Ubarnes, Alfredo Salja Peláez, Carlos Andrés Pérez Ruíz, Pantaleón Avendaño Pedrozo y el extinto Gonzalo Tirado Flórez, quién permaneció por más de 15 años en tan distinguido cargo. Tiempo que le permitió conseguir muchos logros y avances en diferentes campos, debido a su entrega, gestión, compromiso e infinito amor por nuestra amada institución. Paz en su tumba.
Este año 2020, cumple 70 años de vida Institucional, la que ha sido una de las pilares fundamentales de la educación en el centro del Cesar, de donde han surgido profesionales de alta representatividad en múltiples ámbitos a nivel municipal, departamental, nacional e internacional.
Esta institución es hoy una entidad activa, abierta, con objetivos claros, que busca actualmente la calidad en sus acciones y se esfuerza por responder a nuevos desafíos, permanentemente en vínculo con su comunidad. Siempre podemos dar más de sí, más de nosotros mismos; nunca podemos decir que ya estamos en plenitud, porque el horizonte al que nos dirigimos, que es Dios nuestro Señor, no tiene límites.
Un referente que nos llena de orgullo, júbilo y satisfacción. Nuestro himno institucional, que refleja los sentimientos de hermandad y anhelos de triunfo, inscritos en sus estrofas memorables. En cada una de ellas se renueva el sentir de un pueblo digno, que une hijos y hermanos en un mismo suelo.
Nuestra condición humana nos exhorta a guardar siempre fidelidad, respeto y agradecimientos por la institución que nos brinda de manera integral sus conocimientos. Como manifestación cabal y de orgullosa identidad, es nuestra promesa expresarlo, con palabras que llegan desde el fondo de nuestros corazones. Es una oportunidad para reconocer el valor de la institución que va más allá de los desafíos que ha enfrentado hasta el momento y enaltece la esencia de su misión educativa. En su larga trayectoria han pasado personas que han contribuido a su crecimiento y al de cientos de niños, jóvenes y adolescente que son el pilar y razón de ser de la comunidad instedjumeguista. El personal administrativo, directivo y de servicios generales, son partes esenciales para el fortalecimientodel quehacerpedagógico. Como fiel representante, de esta alma mater, Noris Pallares ha sido testigo durante 48 años, del auge y dinamismo de quienes llegan, y que con el transcurrir de los años, parten, listos a empezar otra nueva etapa en su vida.
Algunos llegan para quedarse, otros se van buscando otras salidas u oportunidades de acuerdo con sus intereses vitales, pero todos ellos desde su formación, su experiencia y su concepción de lo que implica el aprendizaje hicieron lo que consideraron más adecuado para nosotros en las distintas disciplinas y sobre todo, pusieron lo mejor de sí en el maravilloso “oficio” de enseñar, no solo de transmitir contenidos, sino de dar ejemplo, ser referente e inculcar valores. Hoy les damos las gracias por haber dejado impregnadas sus huellas en este bendecido claustro.
Cada uno, nos sentimos parte de la historia de esta amada institución, donde compartimos momentos inolvidables del ayer, vivencias que añoramos y las que hoy recordamos con mucha alegría, nostalgia y satisfacción. Ellas seguirán presentes en cada memoria, acompañándonos donde nuestros pasos nos lleven.
Este claustro proclama la excelencia en el saber como eje esencial de la formación y la búsqueda del conocimiento. Por eso exaltamos a todos aquellos que han dejado tan en alto el nombre de nuestra institución y que son un referente a seguir en la construcción de un aprendizaje integral.
La Institución Educativa Juan Mejía Gómez, en sus 70 años de vida, ha logrado ubicarse como una de las más prestigiosas en el departamento; de ella han salido excelentes estudiantes, quienes han obtenido títulos como profesionales y han ocupado importantes cargos públicos y privados; razón por la cual, ha sido conocido su nivel académico en toda la nación.
Esta aula máter ha venido creciendo en todos sus aspectos, de manera rápida y eficiente, pues sus logros han sido reconocidos tanto en la academia como cultural y deportivamente, obteniendo triunfos que le han hecho posicionarse en primeros lugares. En la parte académica, empezando por el cuerpo docente, quienes con sus títulos hacen que la Institución tenga un currículo brillante; ya que la mayoría son especialistas, algunos magísteres y un pequeño grupo doctores.
De otra parte, se han recibido galardones de Andrés Bello en historia y matemáticas. En las pruebas ICFES se obtuvo por tres años consecutivos, el nivel Muy Superior. En la actual Pruebas Saber, un grupo de estudiantes obtuvieron la mención “Ser Pilo Paga”. Las jornadas científicas han sido merecedoras de reconocimientos, al igual que un número de experiencias significativas. Este claustro educativo, va al día con la tecnología con convenios como Vive Digital. Otro convenio que ha sido de gran acierto es el que se tiene con el Sena, los egresados con dicho conocimientostécnicos le abre las puertas para trabajar en cualquier empresa.
En la parte cultural, ha ganado primeros puestos en concursos de poesía regional. Cuenta con una Banda Marcial Musical, la que la ha representado por muchas regiones del país. Grandes puestas en escenas de obras teatrales, danzas, espectáculos navideños (en Inglés) y musicales. Sus coloridos carnavales, desfiles folclóricos y reinados estudiantiles. La parte deportiva ha sido uno de los mejores referentes del Juan Mejía Gómez, pues sus atletas se han destacado en los primeros y segundos lugares en el ranking nacional. La música también constituye un soporte importante para aquellos que han explorado sus aptitudes en este arte, que han cruzado fronteras con melodías e inspiraciones que salen del alma.
El resplandecer de esta institución se ha debido a dos grandes bases fundamentales como lo son, la academia y la disciplina; pues siempre han ido de la mano, unidas para un buen funcionamiento institucional; ya que se acatan las reglas, se guarda el orden, el respeto y se ha observado un excelente comportamiento de sus componentes. Todo esto ha hecho, que este claustro educativo sea reconocido nacionalmente; razón por la cual ha repuntado dentro de los mejores centros educativos del departamento del Cesar. Pará orientar y dirigir estas dos bases, se encuentran los señores coordinadores, quienes han venido realizando una ardua labor.
Los padres de familia constituyen el tercer eje que le da sentido y dirección a una educación tripartita, para que esta sea buena calidad y tenga un impacto positivo en la sociedad. Son ellos el soporte y el respaldo moral que le dan continuidad en casa al aprendizaje de sus hijos, para hacer cambios reales en su vida.
En la vida, unos llevan en sus venas la vocación de enseñar. Enseñar es pasión, es amor, es tejer día a día el hilo del conocimiento haciéndolo un gran tejido pulido, listo para el consumo. El verdadero maestro no se hace, nace, es un sueño hecho realidad; pues sólo aquel que tiene la paciencia de Job, la alegría de un joven y la dulzura innata de un niño, se le puede llamar Maestro. La enseñanza se vive y se refleja en cada buen profesor que aun siente y vive el idilio de enseñar.
En nuestra amada instedjumego, hemos encontrado todos los recursos necesarios para constituirnos como entes activos del proceso de enseñanza- aprendizaje, y así encaminarnos con pasos firmes hacia una dimensión que nos conduzca a metas realizables y seguras, para lograr con éxito nuestro proyecto de vida.
Todo lo anterior, ha sido parte de un maravilloso engranaje, por el cual, hoy la Institución Educativa, es bandera de Chiriguaná ante el mundo, de eso puede dar fe, todo aquel que ha hecho o aún hace parte de una Institución que fue la primera en abrir sus puertas en el centro del Cesar, recibiendo estudiantes de los municipios aledaños, quienes no contaban con un bachillerato para satisfacer sus necesidades
Han transcurrido 70 años de una historia, fortaleciéndonos con la plena convicción de que la constancia, la honestidad, el compromiso, la unidad, la cooperación y el respeto en la labor diaria fueron y son la clave de un pasado histórico que construirán un presente, nuestro presente y el camino al futuro.
“FELICES BODAS DE TITANIO, MI INSTEDJUMEGO DEL ALMA…. AYER, HOY Y MAÑANA “