Adolfo Enrique Arrieta confesó haber accedido carnalmente a la niña de 9 años, a la que posteriormente asesinó y quemó su cuerpo en el patio de su casa en septiembre de 2018.
La sentencia contra el denominado ‘Monstruo de Fundación’, se produjo luego de una corta audiencia (aproximadamente 40 minutos) en donde el togado tras haber narrado los hechos, leyó el veredicto. La pena se le imputó por el delito de feminicidio agravado en concurso heterogéneo con acceso carnal violento agravado.
En la vista pública no estuvo el indiciado más si su abogado defensor; además hizo presencia la madre de la víctima Yeimy Vizcaíno, a quien se le vio notablemente compungida. El padre, Benjamín Rúa, no asistió – según familiares – “porque no tuvo fuerzas para hacerlo”.
María Paula Escorcia, abogada de la familia Rúa Vizcaíno, explicó que “fue una sentencia ejemplarizante que nos permite enviar un mensaje a la sociedad colombiana del cuidado y protección que debemos tener con nuestros niños”. “Se está dando un mensaje de justicia”, anotó.
Comentó que la pena impuesta no fue de 60 años, la máxima esperada, debido a que no era viable jurídicamente “porque había carencia de antecedentes penales en el procesado”.
Se trata de una condena sin beneficio de ninguna clase, pues Adolfo Arrieta García deberá permanecer tras las rejas más de medio siglo.
El aberrante caso que conmocionó a todos un país se registró en la tarde del 28 de septiembre en el barrio Porvenir, de Fundación, cuando Arrieta García raptó a la menor y la introdujo a la fuerza a su casa, en donde abusó sexualmente de ella, la estranguló y en un intento de borrar cualquier evidencia le prendió fuego al cuerpo, según su propia confesión.
Una extensa columna de humo y el olor a carne quemada hizo que sus vecinos alertaran a las autoridades sobre el incidente. Fue así como los patrulleros del cuadrante de la Policía llegaron al predio y encontraron los restos calcinados de la niña calcinada y evidencias materiales (prendas de vestir) de que se trataba de la menor.
Adolfo Arrieta García tiene 54 años y vivió siempre en el barrio El Porvenir del municipio de Fundación (Magdalena). Laboraba en oficios particulares, especialmente repartiendo productos lácteos en un furgón de su propiedad.
Fuente: elheraldo.com.co
